31 de Diciembre del 1969
Los chilaquiles son uno de los platillos de la comida mexicana más reconocidos en todo el mundo, ya sea por su sabor, su manera de prepararse o hasta por las variantes que se utilizan con ciertos ingredientes de acompañamiento.
Todo mexicano sabe que los chilaquiles pueden quitarnos el hambre sin importar si son servidos para desayunar, comer o cenar. Si has ido a una boda, sabes perfectamente que en la noche al son de los mariachis, los chilaquiles serán servidos en tu mesa para que puedas saciar tu antojo, o por ejemplo, nunca pueden faltar en los desayunos dominicales en familia.
Como sabemos que ya se te antojaron unos chilaquiles, queremos compartirte una receta muy sencilla, pero con un toque diferente a los tradicionales, ya que el chile que utilizarás para la salsa será el chipotle.
4 tortillas de maíz de tu preferencia.
3 chiles chipotles.
Aceite (preferentemente de oliva).
4 jitomates de buen tamaño.
1/2 taza de crema ácida.
420 gramos de pechuga de pollo deshebrada.
Queso (al gusto).
1 diente de ajo.
1 rodaja de cebolla
1 rama de epazote.
Pimienta negra.
Sal (al gusto).
Primer paso: Toma los jitomates y hiérvelos en agua caliente en una olla; ya cuando estén fríos muelelos o licualos con el ajo, la rodaja de cebolla y añádele los chiles chipotles.
Segundo paso: Para freír las tortillas, colócalas en trozos en forma de triangulo en un sartén caliente con el aceite; fríelos hasta que se vean crujientes.
Tercer paso: Con la mezcla del primer paso, añadiremos en otro sartén una cucharada caliente de aceite con el epazote, el agua, la sal y la pimienta, para dejarlo cocer por unos 15 minutos.
Cuarto paso: A tu mezcla final colócale los trozos de tortilla frita y revuelve de manera constante durante uno 8 minutos.
Quinto paso: Cuando ya estén revueltos perfectamente, a fuego lento pon el pollo para que se caliente y condimente, y el queso para que se derrita.
Sexto paso: Sirve en un plato, acompáñalos con frijoles y bolillo; colócale una cucharada de crema al centro y disfruta.